Esta compañía fue creada por disposición del rey Carlos III, en septiembre de 1766, a propuesta de don Jerónimo de Torres con la finalidad de perseguir a los malhechores y auxiliar a la Justicia. Se formó con un centenar de hombres distribuidos en 9 escuadras cada una con su cabo. Al mando de cada escuadra estaba un capitán, un teniente y un subteniente. En la guerra contra la Convención Francesa en 1793, dicha compañía fue militarizada, creándose con ello varias compañías que más tarde pasaron a ser trasladadas al Pirineo y luego disueltas.
Intervino en el primer sitio de Zaragoza, en 1808, siendo la única fuerza existente en la plaza que sirvió como base del primer Tercio de Fusileros de Aragón. Más tarde, se formó como batallón del mismo nombre, que fusionado con el segundo Tercio denominado de Torres, se transformó en un regimiento de dos batallones.
Finalizada la Guerra de la Independencia, se reorganizó y permaneció activo hasta el reinado de Isabel II, disolviéndose en 1870.
Intervino en el primer sitio de Zaragoza, en 1808, siendo la única fuerza existente en la plaza que sirvió como base del primer Tercio de Fusileros de Aragón. Más tarde, se formó como batallón del mismo nombre, que fusionado con el segundo Tercio denominado de Torres, se transformó en un regimiento de dos batallones.
Finalizada la Guerra de la Independencia, se reorganizó y permaneció activo hasta el reinado de Isabel II, disolviéndose en 1870.
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